La estructura es nueva y está bien acabada, simple pero muy funcional. Mario es un anfitrión muy amable y servicial, realmente nos hizo sentir como en casa. El desayuno es servido por él en la amplia sala común, todos los dulces caseros son realmente excelentes. Las habitaciones tienen baño privado, aire acondicionado y mosquiteros, lo cual es una ventaja ya que por la noche hace tanto fresco que basta con dejar una rendija de la ventana abierta para disfrutar del aire. La excelente ubicación para visitar toda la costa que va desde Palinuro hasta Marina di Camerota, sin mencionar que la estructura se encuentra en un lugar maravilloso, con un panorama espectacular. En conclusión, una estructura que merece la máxima puntuación.